Trastorno OBSESIVO-COMPULSIVO e ideación OBSESIVA.
El trastorno obsesivo-compulsivo se caracteriza por la presencia de obsesiones y/o compulsiones (llamadas manías). Estas suelen ocupar bastante tiempo en la vida de una persona, y, a su vez, son estresantes y afectan a las rutinas o relaciones sociales. Las obsesiones son imágenes mentales, ideas o pensamientos que causan preocupación y ansiedad. La persona siente estas obsesiones como intrusivas, molestas o no desea tener tales ideas.
Habitualmente, la persona con estas obsesiones lleva a cabo acciones o comportamientos que están dirigidos a reducir o evitar ese malestar. Además, estos comportamientos suelen acabar convirtiéndose en rituales y suponen en la persona un mayor malestar en caso de no llevarlos a cabo.
Es común que la persona que lleva a cabo esas acciones lo haga con el fin de evitar un hipotético suceso temido o peligroso. Algunos ejemplos pueden ser la muerte, la contaminación o una enfermedad de un familiar. Un ejemplo característico del trastorno obsesivo-compulsivo es la contaminación y el lavado de manos. Alguien podría pensar que el hecho de tocar el grifo de un lavabo público podría llevarle a contraer una enfermedad y la forma de evitar esto sería lavarse 7 veces exactamente las manos. Este pensamiento y este ritual podría extrapolarlo a muchas otras situaciones como, por ejemplo, el lavabo y la ducha de su casa, el teclado de ordenador de su trabajo, etc. Al final, esta situación acaba limitando la vida de la persona dado el nivel de malestar que le causa.
Otras temáticas que se suelen ver en consulta son las relacionadas con el orden, la repetición de gestos, rituales mentales como contar o repetir frases o la comprobación.
Contacta con nosotros. Puedes encontrar toda la información en el menú.
Formulario para contactar o pedir cita